Este es un post de invitado de Christian Morillas, creador de Productividad Al Máximo.
Sueñas con montar un negocio digital, pero el tiempo es siempre el mayor obstáculo con el que te enfrentas. No sabes cómo ser más productivo.
Quieres dar el paso al emprendimiento online para poder vivir viajando, disfrutar más tiempo de los tuyos o dedicar más horas a lo que realmente te apasiona.
No terminas de tener clara la hoja de ruta adecuada o no creas tu propósito de forma adecuada para lograr tus objetivos.
Son los típicos casos a los que las personas con ganas de ser sus propios jefes se encuentran por el camino.
¡Hola! Soy Christian Morillas de Productividad Al Máximo y en este artículo quiero enseñarte cómo pasé de no tener ni idea de qué hacer con mi vida a construir mi negocio digital.
Todo ello gracias a dos aspectos principales:
- La productividad, mi pasión convertida en propósito de vida.
- El acceso a la Escuela Nómada Digital (END), cuya hoja de ruta, seguimiento y comunidad han marcado un antes y un después en mi vida.
Ahora ayudo a otras personas a que el tiempo deje de ser un estorbo a la hora de conseguir sus objetivos.
Técnicas y recursos sobre productividad personal, hábitos saludables y emprendimiento al alcance de cualquier persona.
¿Te gustaría conocer los grandes errores que se comenten en productividad?
¿Saber paso a paso cómo poner remedio a tus problemas con el tiempo con diferentes consejos y herramientas gratuitas?
¿Quieres saber de primera mano cómo dar el paso más temido y descubrir los beneficios de esta hoja de ruta?
Pues sigue leyendo esta entrada que he creado especialmente para ti. Vas a poder poner remedio desde el minuto después de que leas las palabras que te dedico.
El tiempo corre, ¡vamos al lío!
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Los 6 errores principales en productividad
Si nos vamos a la RAE, podemos encontrar las siguientes definiciones sobre productividad:
En realidad, no me dice mucho. O no en relación a lo que te quiero contar.
Muchas personas creen que para ser productivo hay que hacer muchas cosas en menos tiempo. Sin embargo, esta creencia está obsoleta.
Para mí la productividad es gestionar todas mis tareas de forma efectiva sin dejar de lado mis pasiones. Es decir, hacer un uso más óptimo del tiempo para poder disfrutar de las cosas que me hacen feliz.
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Haz un uso eficiente del tiempo para poder disfrutar de lo que realmente amas.Ya sea disfrutar más tiempo con tu familia o amigos, hacer esos hobbies a los que nunca llegas por falta de tiempo o empezar aquel proyecto que tienes siempre en la bandeja de “pendientes”.
Son muchos los errores que hacen que el tiempo se nos vaya de las manos. Parece que se nos escapa la productividad de entre los dedos sin darnos cuenta.
A continuación voy a nombrarte los errores más comunes que hacen que no seas una persona productiva.
1. Olvidar tu propósito
Antes de empezar a coger una lista y empezar a llenarla de mil tareas para tachar, párate a pensar:
¿Por qué haces lo que haces?
La mayoría de las personas que quieren ser más productivas terminan abandonando por este error. Antes de comenzar a trabajar en cualquier cosa «sin ton ni son», hazte la pregunta anterior.
Piensa en el propósito por el que estás trabajando.
Recuerda aquello que hace que te levantes con motivación por las mañanas. Si te dedicas a apagar fuegos o tareas sin importancia que no te acercan a tu objetivo principal, terminarás haciendo tareas triviales.
Siempre habrá cosas que te gusten más o menos hacer. No hay que ser estricto en ese sentido. Pero no dediques horas o días en cosas que quedan lejos de tu propósito.
Si lo haces, te darás cuenta al cabo de los días o semanas que estás en el punto inicial y con sensación de que no has avanzado nada.
2. La multitarea
Contradictoriamente, parece ser una de las figuras más buscadas hoy en día y que por otro lado, es de las más tóxicas en cuanto a productividad se refiere.
Miles de frentes abiertos que quieres abarcar al mismo tiempo. Se puede traducir como hacer todo y no hacer nada.
- Estar escribiendo un artículo y dejarlo a medias para chequear el email.
- Buscar información sobre un tema en internet y terminar cotilleando por las redes sociales.
- Decir que sí a todo lo que te proponen sin ni siquiera hacer un estudio rápido de si es o no bueno para ti.
Son solo unos cuantos ejemplos de esta práctica.
La multitarea puede darse por diferentes motivos:
- Distraerse con facilidad.
- No tener el objetivo claramente definido.
- No planificar correctamente.
- No saber decir que NO.
- Etc.
La práctica de la multitarea puede llevarte a frustración e incluso causarte estrés. A efectos de motivación es crucial. Piensa que estás poniendo todas tus ganas en terminar tareas que nunca llegan a su fin. Estás viendo de cerca cómo está pasando el tiempo y cómo todo sigue abierto y sin cerrar.
Tu máxima en productividad debería ser la siguiente: solo una cosa.
Ten en cuenta que en cuanto antes termines algo, antes podrás sacar beneficio de ello. No solo en lo económico, sino también a modo de feedback por ejemplo.
Vas a tener opiniones sobre mejoras y sobre todo, vas a sentir que consigues un avance real y tangible.
3. Objetivos poco realistas
- Conseguir 1.000 suscriptores en 3 días.
- Crear tu web en 5 días sin tener ni idea de diseño web.
- Escribir un par de artículos en un par de horas cuando aún estás en tus primeros meses.
Son solo unos cuantos ejemplos reales que personalmente me he encontrado a lo largo del camino como emprendedor digital.
Ser optimista y ambicioso es bueno. De hecho, creo que son cualidades necesarias si quieres emprender con éxito.
Pero hay que saber diferenciar entre poseer esas características y plantear metas irreales.
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Sé ambicioso y optimista en tu camino como emprendedor, pero evita los objetivos irreales.Si lo único que haces es tachar cosas aleatorias que vas colocando en una agenda (si es que aún no lo haces), que no priorizas y que no les realizas un seguimiento adecuado, estás perdido.
Lo único que vas a conseguir es no llegar a ningún sitio en particular, no acercarte nada a tu objetivo principal o desviarte mucho del propósito que te he comentado en el punto anterior.
4. La falta de hábitos y rutinas
La productividad no es más que un conjunto de hábitos que implementas a lo largo de tu vida, hasta el punto de hacer las cosas sin pensar. Es en esos momentos cuando la rutina creada hace que gestiones mejor tu tiempo.
Se pueden diferenciar entre dos grandes bloques:
- Hábitos saludables con relación a tu cuerpo: dormir mejor, madrugar, alimentación básica, ejercicio, etc.
- Hábitos para ser más productivo en el trabajo: usar el calendario y agenda, trabajar por bloques de tiempo, realizar descansos, etc.
Nada está escrito en piedra, pero es una buena aproximación de lo que te voy a contar en un rato.
Si el transcurso de tu día no sigue una serie de hábitos mínimos, va a ser muy complicado que des un paso más y te conviertas en una persona más productiva.
Aquí podemos tirar de la frase y libro de Steven Covey: primero lo primero.
Hay que crear una base de hábitos troncales sólida para poder llevar tu productividad al siguiente nivel.
5. Distracciones digitales
Sin duda, es el mayor problema en la sociedad en la que estamos.
Internet ha ayudado mucho a los emprendedores digitales, de eso no hay duda. Sin embargo, es un arma de doble filo que tenemos que controlar si no queremos dejar de ser productivos.
Todo internet al alcance de un click. Un sin fin de información que tenemos que saber gestionar. Muchas interrupciones que se nos presentan y en la mayoría de los casos no sabemos bien cómo actuar.
Ya sabes cómo funciona esto:
- Empiezas a contestar un email.
- Pasas por revisar los comentarios de tu último artículo.
- Echas un ojo la interacción de tu último post en Facebook y aprovechas para ver el panel de noticias un rato.
- Ves algo por ahí que te lleva a otra página web, a alguna tienda online o a empezar a planificar alguna escapada de fin de semana.
- Luego te pones a ver las últimas novedades de tu periódico favorito.
Cientos de posibilidades al alcance de tu mano. Saber controlar la tentación digital es posible y te voy a contar en el siguiente apartado cómo hacerlo.
6. El perfeccionismo
He de decir que he sido de los mayores pecadores de este error.
Me encanta que las cosas no salgan solo bien, sino que queden perfectas. No me conformo con cualquier cosa.
Sin embargo, esto me ha traído más de un dolor de cabeza y faltas en las entregas que me había propuesto por ser tan cabezón en muchos casos.
Mejor hecho que perfecto.
Si dedicas demasiado tiempo a algo tratando de dejarlo perfecto, te consumirá el agotamiento. No rindes igual cuando estás en la primera parte de dedicación de esa tarea que en la última. Tu eficiencia va disminuyendo.
Por ejemplo: escribir un artículo para el blog.
Tienes una semana para crear el post y publicarlo, pero el tema del SEO no se te da muy bien. No te preocupes por ello. Busca crear un contenido mínimo de calidad, que ya podrás programar para dentro de unos meses una republicación dándole un repaso al SEO. En esos meses, podrás formarte sobre ello y mejorar.
En lugar de buscar el perfeccionismo, consigue la versión mínima viable de lo que estás haciendo. Siempre podrás volver de nuevo y plantear una mejora.
Al final, todo en la vida es una fase beta constante. En el transcurso de la misma solo intentamos ser cada vez un poco mejores. Con esto hay que hacer exactamente lo mismo.
12 trucos para ser más productivos desde hoy
Hasta ahora te he contado solo los problemas. Todas las razones por las que probablemente no estás sacando el mayor partido posible a tu tiempo.
Pero ni a mí me gusta dejar las cosas en la teoría ni en el blog de Inteligencia Viajera tampoco. Nos hemos juntado aquí para ofrecer soluciones prácticas a problemas reales para emprendedores digitales.
A continuación te voy a describir una serie de trucos que te van a ayudar en tus primeros pasos con la productividad. Una serie de consejos prácticos que puedes poner en marcha desde hoy mismo y sin tener que investigar más.
Como en todo lo referente a rutinas y productividad, te recomiendo que empieces poco a poco. No intentes incorporar todo lo que te voy a decir al mismo tiempo. Deja un hueco para la aceptación e integración progresiva en tu día a día.
Una vez termines con el que consideras que más beneficio te va a reportar, continúa con el siguiente.
Vamos al lío.
1. Crea objetivos inteligentes u objetivos SMART
Empezamos por el principio. La hora en la que tienes que darle color a tus objetivos y empezar a planificar.
Una solución al error de los objetivos poco realistas, son la creación de objetivos SMART. Esta palabra se corresponde al desglose de sus iniciales:
- Specific (específico): Hay que contestar a cuantas más uves dobles mejor (What, Which, When, Where, Who, Why). Definir al máximo lo que quieres conseguir sin dejar hilos sueltos por el camino que nos hagan perder tiempo después.
- Measurable (medible): Es necesario establecer la forma en la que se va a realizar el seguimiento. De esta forma, ver que estás o no avanzando en el progreso de dicho objetivo.
- Achievable (alcanzable): Se ambicioso, sí. Pero realista. Trata de imaginarte consiguiendo ese objetivo en un primer paso.
- Relevant (relevante): Tiene que estar alineado con tu propósito y valores. Si te contradices, es más que probable que abandones y nunca lo termines.
- Time-Bound (en tiempo): Ponte una fecha límite. Nada de dejar a la incertidumbre este factor. Si no, la Ley de Parkinson atacará:
El trabajo se expande hasta llenar el tiempo de que se dispone para su realización (Ley de Parkinson).
Te pongo unos ejemplos de objetivos comunes y también con planteamiento SMART:
- «Quiero viajar más» VS «Cada año voy a realizar un viaje intercontinental de al menos dos semanas de duración para conocer una cultura más».
- «Quiero conseguir más suscriptores» VS «Voy a publicar un guest post al mes y e invertiré 100€ al mes en Facebook Ads para conseguir 1.000 suscriptores de aquí a 6 meses».
- «Quiero ahorrar más» VS «Ahorrar un total de 6.000€ para tener un colchón financiero que me permita vivir con tranquilidad, apartando 500€ cada mes a una cuenta independiente».
¿Notas la diferencia? Luego me cuentas. 🙂
2. Divide y vencerás
Aquí el tamaño importa. Cuánto más pequeña sea, mejor.
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Nada es particularmente difícil si lo divides en pequeños trabajos (Henry Ford).Cuando tienes un objetivo en mente, hay que desglosarlo en otros más pequeños. Así progresivamente hasta que llegues a una unidad de una tarea, que básicamente es una acción.
Ejemplos de objetivos y su desglose en tareas:
- Crear un Lead Magnet: crear índice escribir contenido, introducir imágenes, colocar enlaces a artículos, diseñar portada, etc.
- Introducir un podcast: abrir cuenta en iVoox/iTunes, buscar música para intro/outro, crear entrada y salida, grabar contenido, editar audio, etc.
- Escribir un artículo: escribir índice borrador, desarrollar puntos individuales, colocar enlaces de interés, introducir contenido audiovisual, maquetación y revisión final, etc.
Cuanto más pequeña sea la tarea, más fácil es que la realices en el tiempo que te has propuesto y que no te distraigas con cualquier otra cosa.
Si te marcas objetivos que son demasiado amplios, para los cuales tienes que invertir horas o días, no será de extrañar que te disperses con otra cosa.
En mi experiencia, lo que mejor me ha funcionado en todo este tiempo, es programar acciones que no implique más de una hora de tiempo aproximadamente. De esta forma, me aseguro que voy a cumplir con esa tarea.
Obviamente, esta cifra es relativa y depende de cada persona y contexto. Con lo que quiero que te quedes, es que busques esa cantidad de tiempo que se adecua a ti.
3. Planificación y revisión de objetivos
Ya sabes cómo crear un objetivo en condiciones con los dos apartados anteriores. Ahora toca saber cuándo te vas a poner a trabajar en ellos.
Hay muchas formas de trabajar, pero te voy a contar aquella en la que coincide la mayoría de la gente que se dedica a la productividad. Yo la llamo la regla del 5-3-1.
¿De qué va esta regla?
5 objetivos en el día, 3 objetivos en la semana, 1 objetivo al mes.
De nuevo, estos números son extrapolables a tanto en número como en periodo de tiempo. Perfectamente podría ser 5 objetivos a la semana, 3 al mes, 1 al año. Ya sabes a lo que me refiero.
Se trata de tener un gran objetivo a vista y tratar de desglosarlo a medida que el periodo de tiempo disminuye.
Beneficios de planificar:
- Haces uso del truco anterior de dividir y vencer.
- Tienes una hoja de ruta o plan general en tiempo de qué tienes que hacer y cuándo lo vas a hacer.
- Vas a poder llevar un seguimiento del progreso en cada una de las actividades. Poder tener un feedback inmediato de si te estás ajustando bien a ese plan, si te has quedado corto o no. Vas a poder actuar en consecuencia con esta mejora continua.
- Sabrás en todo momento a dónde te diriges, lo que hará mucho más fácil que no te disperses en otros asuntos.
Una buena planificación puede marcar un antes y un después tanto en tu productividad personal como en la profesional. No la descuides 😉
4. Aprende a delegar
Delegar es de sabios.
Puede que estés en tus comienzos como emprendedor y no tengas la capacidad económica para dar este paso, pero es algo que poco a poco te vas a dar cuenta. Aprender a delegar marcará un alivio en tu vida.
No puedes llegar a todo, es imposible si quieres crecer y escalar dentro de tu negocio digital. Para poder llegar lejos, tienes que tener un equipo de personas detrás que te ayuden con esas tareas que tanto tiempo te roban.
Tú, como emprendedor, tienes que dedicar el máximo tiempo posible a lo que realmente eres bueno:
- Crear contenido.
- Ofrecer servicios.
- Construir infoproductos.
- Etc.
Tareas como el manejo del email, la gestión de las redes sociales o el mantenimiento técnico del blog suelen ser las primeras que se suelen delegar. De ahí puedes pasar a cualquier cosa que te imagines: diseño web, revisión SEO de contenidos, temas de legalidad y fiscalidad, publicidad en Facebook, etc.
Es bueno que sepas de todo, eso es innegable. A mí mismo me gusta aprender a hacer todo por mi cuenta antes de delegar alguna tarea. De hecho, de esa forma puedo ser más crítico.
Tu tiempo es limitado, así que, si aún no lo haces por el motivo que sea, empieza a pensar en qué tareas te roban más tiempo para comenzar a buscar una solución.
5. Usa bloques de tiempo
Antes te he contado la importancia de hacer un desglose lo más extenso posible de las tareas que tengas que realizar.
Ahora toca definir el tiempo que le vas a dedicar a cada una de ellas y cómo vas a trabajar para que puedas trabajar y descansar sin dejar ninguna de las dos partes de lado.
La concentración humana es fugaz. Si una tarea te lleva varias horas, es mucho más fácil que te distraigas con algo.
Sin embargo, cuanto menos tiempo necesites estar concentrado en algo, mayores probabilidades habrá de que ese periodo de tiempo sea 100% eficiente.
Esta estrategia es de las mejores para evitar caer en esas distracciones digitales que tienes al alcance de un click de ratón.
¿Cómo puedes implementarla?
Mucho más sencillo de lo que puedas imaginar.
Existen las denominadas técnicas Pomodoro para ello. Se trata de asignar bloques de una cantidad de tiempo determinada para trabajo y otra para descanso.
La más común suele ser 30 minutos, de los cuales 25 son de trabajo enfocado y los 5 minutos restantes para descanso. Después, cada 3 o 4 iteraciones, se realiza una pausa más larga de 15 o 30 minutos.
Todos estos números son orientativos y dependen de cada persona, tipo de actividad, etc. Lo importante es que respetes el uso de cada periodo de tiempo:
- Aparta el móvil en ese tiempo de trabajo, desactiva las notificaciones o pon el modo avión.
- Olvida internet y las redes sociales si estás con el ordenador.
- Piensa únicamente en esa tarea que tienes que hacer. No pierdas el foco de trabajo.
Quédate con la idea que te quiero transmitir y empieza a sacarle el máximo rendimiento a tu tiempo de trabajo.
6. Invierte en formación
Piensa que hay personas que ya han pasado por casi todo lo que quieres aprender.
Puedes ir siempre por tu cuenta por el lado gratuito, no hay problema. Pero obviamente, vas a ir más lento y vas a tragar mucha morralla que se encuentra en internet. Lo complicado aquí es hacer un filtro en condiciones.
Es ahí donde vas a ahorrar muchísimas horas de tiempo que podrás poner a disposición de lo que realmente es importante.
La formación continua es sin duda la mejor inversión que puedes hacer para que tu tiempo sea más eficiente.
En mi caso destino entre un 10% y un 20% de mis ahorros anuales en formación. Todo aquello que me va a ayudar a conseguir mis objetivos tiene cabida aquí. Creo que es una cifra más que razonable para acelerar el cumplimiento de las metas establecidas.
No se trata de gastar por gastar ni mucho menos. De hecho, no estoy nada a favor de comprar cursos o formaciones sin más, solo porque hay una promoción especial o está muy barato. Solo recomiendo adquirir aquello que realmente necesitas en el momento oportuno.
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Invertir en formación es la mejor manera de llegar más rápido y más lejos a tu objetivo.Nada de comprar para empezar 6 meses más tarde. En ese transcurso del tiempo puedes haber cambiado de opinión respecto a esa formación, o te ha dejado de interesar o cualquier otro motivo. Entonces, habrá sido una inversión fallida.
Jamás lo veas como un gasto, míralo siempre como una inversión a largo plazo. Me he gastado miles de euros en formación específica, y de haber sabido con seguridad los resultados que me han aportado, hubiera invertido incluso el doble. 😉
7. Huye del email
La bandeja de entrada en los emprendedores digitales puede transformarse en uno de los mayores y temidos ladrones de tiempo.
Pasar toda tu jornada laboral con la pestaña del email abierta, revisarla 18 veces al día o quedarse pasmado delante de ella aun cuando no hay ninguna novedad, no aporta nada. Es un tiempo muerto y que además, solo hace que seas menos efectivo.
Este tipo de prácticas solo hacen que te sientas en un estado de alerta constante, esperando a que un nuevo mensaje llegue para automáticamente ir a ver qué novedades hay.
Tienes que ponerle freno a todo esto. Existe vida más allá del email. Piensa que si algo es realmente urgente e importante, te van a llamar por teléfono.
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El mundo va a seguir girando pese a que no estés en frente del email las 24 horas del día.Trata de reducir el consumo del email o sus revisiones a 2 o 3 veces máximo al día. Establece bloques de tiempo para ello, por ejemplo, a primera hora de tu jornada laboral, después del almuerzo y a última hora.
Recuerda que no todo tiene que ser revisado, leído y respondido. De un simple vistazo puedes:
- Eliminar unos cuantos solo leyendo el asunto del mismo.
- Saber los que tienen que ser contestados (y no en ese instante).
- Contestar los importantes.
Quizás puedas esperar para responder unos cuantos en el mismo bloque de tiempo.
Haz un uso responsable de tu bandeja de entrada si no quieres perder la mitad de tu día de trabajo.
8. Lista de tareas la noche anterior
Te hago un par de preguntas:
- ¿Cuántas veces te has parado horas por la mañana a pensar lo que tenías que hacer en ese día?
- ¿Cuántas horas pensando dónde te quedaste ayer?
Sí para esas dos preguntas tu respuesta ha sido “muchas”, lo que viene ahora te interesa.
Estás trabajando en lo que sea durante el día, durante toda la jornada que te hayas propuesto. Llega el punto en el que dejas de trabajar y desconectas por completo.
Al día siguiente te levantas y tienes que invertir tiempo en simplemente ver en qué punto estabas.
Tu productividad hoy comenzó ayer.
Esto puede solucionarse escribiendo una lista de tareas para el día siguiente una vez terminas tu jornada laboral.
Piensa que es justo en ese momento cuando tienes todo fresco. Sabes exactamente lo que se ha quedado pendiente, lo que viene ahora y lo que tienes que hacer justo después al terminar.
Todo tipo de detalles que vas a poder imponer para que solo tengas que gastar unos minutos al día siguiente. El ahorro de tiempo aquí está más que compensado.
9. Introduce hábitos saludables
Vamos con una de las partes más importantes que te van a ayudar de forma exponencial a mejorar tu productividad, además de tu salud.
Ya te comenté en el apartado de los errores, que la productividad es en sí un conjunto de hábitos que adoptamos en nuestra vida diaria.
Pues bien, ha llegado el momento de tocar los principales.
A. Alimentación saludable
La alimentación es importante. Supongo que es un factor que entiendes que no hay que pasar por alto.
Una nutrición equilibrada es básica para que tu cuerpo esté con energía y pueda funcionar correctamente y sin percances.
No soy ningún experto en nutrición, pero me manejo con lo esencial. Seguramente no te vas a extrañar si te comento algunos puntos básicos. Por ejemplo:
- No abuses en las cenas o comidas previas a la hora de irte a dormir.
- Hidrátate de forma adecuada, bebiendo al menos dos litros de agua al día.
- Evita las grasas saturadas, fritos y azúcares.
- Introduce las proteínas magras y grasas no saturadas, como los frutos secos.
En muchos casos vas a poder tirar de sentido común para saber lo que es y no es bueno para ti.
Recuerda que si tú no estás sano, raramente vas a poder rendir en tu máximo potencial.
B. Madrugar
El más temido y odiado.
Poca gente es amante de salirse de las sábanas temprano. Normalmente las personas son más de estirar la alarma del despertador al máximo.
En esta sociedad, llena de prisas, de agobios y de ruidos, es complicado tener un momento únicamente para ti. Es en esas primeras horas del día donde puedes encontrar ese momento apartado de todo lo demás.
Ahí es cuando puedes crear y seguir una rutina matinal saludable para empezar con fuerza el día.
Es imposible que alcances tu máximo potencial de productividad si cuerpo y mente no están sanas.
Una vez te levantes, sería ideal que pasaras un tiempo de tranquilidad para practicar alguna actividad tranquila y que te active, como estirar o practicar algo de yoga, entre otras.
También para hacer un breve resumen de esa lista que hiciste el día anterior, tomar un desayuno en condiciones o salir a hacer algo de deporte.
Sea lo que sea que decidas, no empieces a trabajar a los minutos de despertarte. Estás en modo zombie y tienes que espabilar primero si no quieres trabajar con lagañas aún.
Es además en esas primeras horas del día, cuanto tu mente es más productiva.
Vienes de un descanso extenso, con la mente clara. Mucho mejor aprovechar la mañana para hacer las tareas más tediosas y que siempre procrastinas que empezar a trabajar; por ejemplo, revisar el email.
Si eres de las personas que siempre quiso y nunca lo consiguió, aquí te dejo una megaguía para madrugar sin tener sueño.
C. Ejercicio
Hay que moverse si no quieres caer en el sedentarismo.
La actividad física es otro de los pilares básicos dentro de los hábitos saludables. Una mínima dedicación puede aportar mucho retorno.
Una hora al día sería ideal, pero como no me canso de repetir, ve despacio hasta que no te cueste trabajo hacerlo.
Empieza por 3 horas a la semana por ejemplo, repartidas como quieras (3 sesiones de una hora o 6 sesiones de media hora).
Busca aquella actividad que te gusta o la que menos trabajo crees que te va a costar hacer. Aquí tienes que buscar la constancia, no una actividad fugaz. Tipos de actividad hay miles:
- Correr.
- Bicicleta.
- Natación.
- Pilates.
- Gimnasio.
- …
Coge la que más te guste o la que más rabia te de y ponte manos a la obra.
El momento del día en el que estadísticamente las personas abandonan menos, son las mañanas.
¿Recuerdas ese momento solo para ti que consigues al madrugar?
Aquí tienes una actividad ideal para introducir en esas primeras horas: levantarte de la cama, echarte un agua en la cara, ponerte las zapatillas y a la calle a correr.
Es la mejor forma de activarse por las mañanas. Además, en cuanto llegues a casa, te sentirás muy realizado. Estás aún en las primeras horas del día y ya te has quitado el deporte.
No descuides tu cuerpo. Solo tienes uno.
D. Descansos periódicos y semanal
Una parte de ello ya te lo he comentado en el consejo del uso de bloques de tiempo. No es viable en términos de productividad estar 3 horas seguidas sin hacer un descanso.
Estirar el uso de la mente al máximo no conlleva un rendimiento lineal, sino una exponencial que tiende a cero.
Para no extenderme mucho más, solo decir que debes introducir esas pausas entre esos bloques o los que consideres.
Por otro lado, te animo a introducir (si aún no lo haces) un día de descanso completo en la semana.
Un día, el que quieras, pero no hagas nada relacionado con el trabajo. Vete a echar el día fuera, a pasear, a ordenar el trastero o a tirarte en el sofá viendo películas. Pero olvida poner tu mente a trabajar de nuevo.
Necesitas de nuevo un descanso al completo para resetear tu cabeza y que pueda volver con fuerza para un nuevo ciclo de trabajo.
10. Minimalismo digital (y material)
El minimalismo es una de las claves que poca gente piensa que pueda aportar algo a la productividad.
Cuando piensas en esta palabra, seguro que se te viene a la cabeza la imagen de una casa casi vacía. Muebles blancos, poca decoración, armarios casi vacíos.
Si hablamos de productividad, hablamos de hacer lo que realmente es necesario para avanzar.
Se trata de saber filtrar entre todas las cosas que tenemos en la cabeza y escoger aquellas que realmente merecen la pena realizar.
Dicho en otras palabras, se trata de eliminar aquello que no nos ayuda a recorrer nuestro camino.
En lo referente a la parte digital, se trata de minimizar al máximo tu consumo en la red. Estamos infoxificados, recibiendo estímulos continuamente al estar expuestos a internet en casi todo momento. Trata de eliminar parte de tu vida digital. Por ejemplo:
- Deja de visitar aquellos blogs que desde hace un tiempo, sabes que no te aportan nada.
- Desuscríbete de las newsletter que desde hace meses no lees siquiera.
- Mantén limpio y ordenado el escritorio del ordenador y espacio de trabajo digital para evitar distracciones y pérdida de tiempo.
Son solo unos ejemplos para que veas que en realidad, todo se puede simplificar para lograr una vida un poco más minimalista.
En cuanto a la parte material, puedes pensar en las cosas más típicas. Cuantas menos cosas poseas, menos dependencias y preocupaciones vas a tener.
Procura mantener tu espacio de trabajo lo más ordenado posible, con el menor número de posibles distracciones.
Por norma general, lo más simple es lo que mejor suele funcionar para ser más productivo cuando trabajas.
11. Ayúdate de la tecnología
Somos emprendedores digitales, usamos el ordenador y teléfono móvil para casi todo el trabajo que hacemos. Qué mejor idea que aprovechar al máximo las herramientas digitales que están a nuestra disposición para poner el tiempo de nuestra parte.
En este apartado voy a nombrar y describir algunas de las aplicaciones y herramientas que pueden hacerte la vida más sencilla en algún ámbito de la productividad. Todas de uso simple y gratuitas.
A. Toggl
Para mejorar, es necesario medir.
Toggl es una herramienta para controlar el tiempo que destinas a cada tarea en particular.
Usa un sencillo contador de tiempo que puedes iniciar y visualizar desde una pestaña de tu navegador, y pausarlo en cualquier momento.
Al final del día podrás ver el tiempo invertido en esa tarea en particular en un resumen de las diferentes en las que hayas trabajado.
Puedes hacer diversas clasificaciones, como separaciones por proyectos, clientes, etc.
Es muy útil para darse cuenta del tiempo que realmente estás usando para cada tarea y llevar un control del mismo.
Imagina que estás gastando la mitad de tu tiempo en tareas que no te aportan nada o muy poco. Sabrás que esas son las primeras que deberás empezar a delegar.
O por ejemplo te das cuenta que pasas 4 horas pegado a la bandeja de entrada. Podrás ver que tienes un verdadero problema con el email y tendrás que ponerle solución.
B. Tomato Timer
Para el uso de los bloques de tiempo, tenemos la aplicación web Tomato Timer.
Herramienta online muy sencilla, en la que puedes configurar un montón de cosas útiles como:
- El tiempo de trabajo.
- Las pausas cortas.
- Las pausas largas.
- El sonido para las notificaciones que te va a mostrar para que no te pases.
- …
Es una simple aplicación para empezar a poner en marcha esta técnica si no quieres complicarte demasiado.
C. KanbanFlow
Aquí una de mis favoritas.
KanbanFlow es una herramienta para la gestión de proyectos que te puede ayudar a tener todas las tareas bajo control.
Puedes plasmar todas las ideas que tengas sobre cada proyecto en el que estés trabajando, desglosar las subtareas que consideres, establecer una fecha límite de entrega, y mucho más.
Puedes compartir y asignar tareas a otros miembros del equipo que hayas creado, definir categorías por colores para hacerlo todo más visual o crear listas.
Como marca la metodología Kanban, se trata de no saturar a ningún miembro del equipo con el que trabajes y de un simple vistazo sepas en qué parte estás. Si estás trabajando solo, pasa exactamente lo mismo.
Tienes diferentes columnas configurables con diferentes finalidades:
- To-Do: cosas por hacer.
- Do today: tareas planificadas para hoy.
- In progress: tareas actualmente en progreso. Normalmente se toma por defecto no tener más de 3 al mismo tiempo, para así evitar la multitarea y mantener el foco de trabajo.
- Done: la mejor de todas, cuando la tarea ya está completada 🙂
Otro punto muy bueno, es que contempla las dos herramientas anteriores, ya que incluye un contador Pomodoro que puedes activar desde cada tarea. Al final del día, semana o mes, puedes ver un resumen final de todo el trabajo que has realizado y sacar tus propias conclusiones.
Yo estoy enamorado de esta herramienta, no te voy a engañar.
Merece la pena que le eches un ojo y juegues con ella.
D. Calendario
No hay que dejar de lado los clásicos.
Ya sea un calendario físico, en el propio de tu cuenta de google o en cualquier otro, todos te puede salvar la vida para todas esas citas que tengas que atender.
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El cerebro humano no está hecho para recordar, sino para pensar.Libérate de todas esas fechas y horas haciendo uso del calendario.
También puedes aprovechar para bloquear ciertos bloques de tiempo para cosas que sabes que vas o tienes que hacer. Por ejemplo, tus horas de ejercicio, de estudio o formación, de gestión del email o redes sociales, de las comidas, etc.
Cuanto más completo lo tengas, mejor.
La improvisación e interrupciones van a tener lugar sí o sí, es inevitable. Lo que debes de buscar aquí es tener lo máximo planeado para que el daño sea menor.
E. Feedly
Si eres de las personas a la que le gusta estar informado de todo, Feedly es tu solución.
Es un gestor de noticias que agrupa todas las categorías que puedas imaginar: actualidad, deportes, economía, humor, blogs, etc.
En lugar de ir web por web revisando las novedades de la misma, concéntralas todas en esta aplicación gratuita (tanto para web como para dispositivo móvil).
En su pantalla principal, aparece un listado con todas esas suscripciones que tienes con un número al lado que representa las entradas que no has visto aún. Una revisión de ellas es fácil con un simple scroll down para ver si hay algo realmente de interés sin tener que leerlo todo.
Esta herramienta puede ahorrarte ingentes cantidades de horas de navegación por internet.
12. Recompénsate por tus victorias
¡Es la mejor parte!
El ser humano es mucho de actuar por premios finales. Si le propones una recompensa por hacer cierta actividad, se va a esforzar mucho más en conseguirlo.
No se trata de esperar a tener el mayor logro del siglo. Hazlo simple.
Celebra cada pequeño paso que te haya ayudado a conseguir tu objetivo.
Ya sea haber conseguido incorporar un hábito saludable a tu vida, hacer tu primera venta, cerrar una posible colaboración, etc. Todo cuenta.
¿Cómo celebrarlo?
Está en tus manos:
- Ve a tu restaurante favorito.
- Haz una escapada para despejar la mente.
- Quédate hasta tarde en la cama.
- Simplemente tómate una cerveza.
Se trata de hacer tu vida lo más amena posible, y saber que no todo es currar sin más.
Obviamente, intenta hacer lo más saludable posible esas recompensas. Por ejemplo, si estás luchando por evitar la adicción al teléfono móvil, no te pongas de recompensa pasar un día entero navegando por las redes. Como verás, es bastante contradictorio.
Pensar en ese beneficio te ayudará a tener una fuerte motivación para no tirar la toalla.
Mi experiencia
Desde hace ya unos dos años sabía que quería emprender en algo.
¿Mi mayor problema? No tener ni idea de qué hacer o a qué dedicarme. Tenía que salir ahí fuera a descubrir mi talento y ver qué podía ofrecer a la sociedad.
Es posiblemente uno de los mayores obstáculos que tienen las personas a la hora de emprender y dar el paso.
En este apartado quiero desglosar los puntos más importantes de este primer paso que tuve que dar. De no tener absolutamente ni idea de qué hacer, a conseguir una hoja de ruta definida para poder desarrollar mi negocio digital.
1. No saber por dónde empezar: comenzar desde 0
Tienes las ganas, tienes la motivación, pero no tienes ni idea de dónde poner el foco de trabajo para hacer tangible ese emprendimiento que quieres llevar a cabo:
- Partes de la nada, con la mente en blanco como si de una habitación vacía se tratara.
- El miedo a la incertidumbre, al qué dirán tus seres queridos, al posible fracaso.
Todas esas cuestiones te las vas a repetir una y otra vez sin descanso en tu cabeza.
A la hora de empezar te encuentras solo ante miles de posibilidades. Es fácil y normal no saber qué camino escoger. Si no tienes a alguien que haya vivido la misma situación, es difícil comprobar si lo que estás haciendo te va a llevar a buen puerto o no.
Todo se puede agrupar en la elección de uno de los dos siguientes caminos:
- Avanzar por tu cuenta y en solitario: buscándote la vida e investigando sobre cada obstáculo con el que te encuentres.
- Ir de la mano de personas que han vivido lo mismo y confiando en su criterio: personas que ya han pasado por el mismo camino que tú quieres conseguir y que van a evitar que tropieces con las mismas piedras que te vas a encontrar.
Si caminas solo, irás más rápido; si caminas acompañado, llegarás más lejos (Proverbio chino).
En este punto, supongo que ya sabes el camino que elegí 🙂
2. El momento de dar el paso: salir de la zona de confort
Pasaban los meses, las frustración crecía.
Cada vez tenía más claro que la oficina a la que tenía que ir cada mañana no estaba hecha para mí.
Me pasé mucho tiempo investigando la blogosfera. Personas que habían conseguido el estilo de vida que yo andaba buscando: libertad de lugar y flexibilidad horaria. En otras palabras, toda la filosofía que emana un nómada digital.
Eso se convirtió en mi sueño, y sabía que tenía que hacer algo diferente si lo quería hacer tangible.
Si buscas resultados distintos no hagas siempre lo mismo (Albert Einstein).
Tenía que salir de esa zona de confort a la que estaba acostumbrado. Explotar esa burbuja conformista y pasar a otro nivel de libertad.
Había probado muchas cosas por mi cuenta:
- Cursos baratos para sentirme activo.
- Empezar pequeños proyectos con algún amigo que no llegaron a ningún lado.
- Participar en diferentes comunidades, pero sin seguir una estrategia en particular.
- Etc.
Ahora tocaba probar algo diferente. Llegaba el momento de caminar junto a personas que podían allanarme el camino.
Antonio llegó a tiempo con su primer lanzamiento de la END, en septiembre de 2017. Aunque le seguía desde hace bastante tiempo, nunca le había hecho demasiado caso. Pero en esos vídeos del training gratuito, daba en el clavo con cada palabra que decía.
Parecía como si me conociera de toda la vida, sacando a flote todos los puntos de dolor que llevaba arrastrando desde tanto tiempo atrás.
Las puertas de la END se abrieron, las cartas estaban sobre la mesa. Tenía que tomar una decisión, y tenía que ser ya.
No te voy a engañar si te digo que ha sido posiblemente una de las decisiones que menos tiempo he tardado en tomar.
Inscribirme en la END fue una de las decisiones que menos tiempo tardé en tomar.
Tenía que probar.
¿Qué era lo pero que podría pasar? ¿Que siguiera con la misma vida que tenía? Sí, pero podría ganar la otra vida que andaba buscando.
3. Ventajas de tener una hoja de ruta
Imagina todas las posibilidades que te da tener un guion de todos los pasos que tienes que llevar a cabo para construir tu negocio digital de éxito.
No solo la estrategia, sino el tiempo que vas a ahorrar investigando por tu cuenta. Al final, es una manera más de ser más productivo, invirtiendo tiempo en pasos que te acercan seguro a tu meta.
Accedí a la END sin tener absolutamente idea de qué quería hacer con mi vida. Lo único que tenía claro era que quería un cambio, y lo quería ya.
Aquí es donde entra toda la estructura y esquema didáctico que se ha creado dentro de esta escuela. Un orden lógico unido a las necesidades particulares de cada alumno.
En menos de un mes, ya pude construir mi propósito y encontrar mi camino. Y en pocos más, conseguí lanzar Productividad Al Máximo.
Ahora ayudo a otros emprendedores y personas ocupadas a gestionar su tiempo con recursos de productividad personal hábitos saludables y emprendimiento.
No quiero que el tiempo sea el típico problema para que las personas no consigan sus objetivos.
Sin duda, para todo esto hay que currar mucho. Nadie hace el trabajo por ti.
El seguimiento y soporte por parte de los tutores ha sido clave para poder lograr todo objetivo o esquivar los obstáculos que me he encontrado por el camino.
Y sin duda, lo que más me gusta de toda la END, es la comunidad que se ha montado. El compañerismo brilla, un sin fin de aportes altruistas, de feedback constructivo.
Compartimos nuestros avances, nuestros bloqueos, nuestros logros y nuestras cagadas. Todo cuenta para poder seguir adelante.
No solo me llevo un proyecto de vida. Me llevo una vida que estoy recorriendo con amigos que comparten todas mis inquietudes.
Conclusiones: cómo la END me ha ayudado a mejorar mi productividad
La Escuela Nómada Digital ha sido un punto de inflexión fundamental en mi camino, tanto como emprendedor como en la gestión de mi tiempo. El tener toda una hoja de ruta definida me ha hecho ahorrar cantidades incontables de horas de investigación.
Ir a lo seguro, a lo que ya funciona y dejarme de historias que no llegan a buen puerto.
Lo mejor de todo es que es una comunidad creada para toda la vida donde los materiales se actualizan de forma constante a medida que aparecen nuevas estrategias. Este es sin duda uno de los mayores beneficios de estar dentro.
La productividad está al alcance de cualquier persona.
De nada sirven las excusas de no tener tiempo o de desear que el día tenga más de 24 horas.
Todo es cuestión de hábitos y constancia. Una vez consigas incorporarlos a tu rutina diaria, el cumplimiento de tus objetivos van a llegar como si nada.
Si quieres empezar a ser el jefe de tu tiempo, puedes descargar mi guía gratuita “7 errores que te impiden avanzar + sus soluciones”.
Recuerda no quedarte parado. Pasa a la acción antes de que te arrepientas.
Empieza a luchar por los sueños que tanto tiempo llevas pensando y no terminas de cumplir.
Imprescindible si quieres llegar a donde te propones. 😉
Ahora cuéntame tú
¿Padeces algunos de los errores principales en productividad que te he mencionado?
¿Echas en falta algún que otro truco para mejorar tu gestión con el tiempo?
¿Careces de hoja de ruta y no sabes cómo continuar tu camino?
Responde y compártelo con los demás en los comentarios, estaré encantado de contestar a cualquier duda que te haya quedado 🙂
¡Un fuerte abrazo!
Fotografía Shutterstock: Hombre asiático trabajando sentado sobre una gráfica
18 comentarios
¡Buenas equipo!
Muchas gracias por dejarme un hueco en el blog para aportar mi granito de arena.
Espero que los consejos y trucos que propongo puedan ayudar a todos los emprendedores que se pasen por aquí.
Siempre llevamos el tiempo al límite, y por suerte o desgracia, no podemos ir marcha atrás 🙂
¡Un fuerte abrazo!
¡Hola Christian!
Gracias a ti, nos has regalado un superpost que aporta un montón de valor a los lectores.
Estos consejos no solo pueden ayudar a los emprendedores digitales como tú, también sirven para trabajadores por cuenta ajena y freelancers. Están muy bien explicados y desde luego disparan tu productividad cuando los aplicas. Buena selección, ¡eres un crack!
Enhorabuena y a seguir trabajando así, ya ves que poco a poco te van llegando las recompensas. 😉
Un abrazo
Hola Christian! Me he sentido tan identificada con algunos de los errores… jaja supongo que todos funcionamos parecido. Lo bueno es darse cuenta de lo que haces mal para poder corregirlo. Para mi se acabo el mail a todas horas! Muchas gracias por tu superartículo!!
Un abrazo!
¡Hola Natalia!
Gracias por pasar por aquí 🙂
Muchas veces tenemos la creencia que por actuar todos de forma parecida no podemos hacer mucho. Pero simplemente el hecho de que te hayas dado cuenta, es el primer paso para ponerle solución.
La bandeja de entrada suele ser uno de los mayores ladrones de tiempo de muchos emprendedores digitales. El dejarse llevar por dejar la pestaña abierta a todas horas y el darle prioridad absoluta frente a cualquier otra cosa.
Empieza a poner en práctica la reducción de visitas al email de forma progresiva. Si está todo el día abierta o la abres 15 veces al día, disminuye a 10 por ejemplo. Luego a 8, a 6, etc, hasta llegar a esas 2 – 3 máximo.
Ya verás la liberación que vas a sentir. Y te lo digo por experiencia, que ha sido una de las cosas que más trabajo me ha costado poner en marcha 😛
¡Abrazo!
Justo cuando estoy pensando en cómo ordenar todo para optimizar el uso de mi tiempo, me encuentro con este artículo!! Me siento identificada con muchos de los errores que mencionas, como las redes sociales como distractores y el navegar por internet leyendo y leyendo entre tanta información para encontrar respuestas a la misma pregunta de siempre: cúal es el siguiente paso?
Quiero emprender, tengo algunas ideas pero no tengo una hoja de ruta y me paralizan muchos factores pero la lectura de este post es un buen inicio para poner muchos detalles en perspectiva.
Sin duda seguiré los consejos! Muchas gracias por toda esta información de calidad.
¡Hola Tania!
Genial que te haya llegado esta información en el momento adecuado 🙂
Las redes sociales nos comen la mayor parte del tiempo sin que nos demos cuenta siquiera. Es muy fácil empezar a ver alguna notificación y luego, sin más, seguimos las sugerencias que nos da la aplicación para seguir ojeando.
Han pasado tres cuartos de hora y te quedas en plan…»otra vez» 😛
Exactamente lo mismo ocurre cuando navegas por la red buscando una respuesta a tu pregunta.
Espero que todos los consejos que doy para ponerle solución a los errores principales te sean de ayuda.
Ya sabes que para emprender o para conseguir cualquier objetivo, lo primero es dar un paso. Menos pensar y más actuar.
Confía en aquellos que ya han conseguido lo que quieres. Nadie mejor que ellos te van a poder ayudar a salir de ese paso.
¡Un abrazo!
Buenas,
Excelente articulo. Genial hoja de ruta para ser mas productivo. Algo fundamental para ser emprendedor, sobretodo cuando lo tienes que compaginar con un empleo por cuenta ajena.
En cuanto a los errores que comentas, poco a poco los voy superando, aunque el del perfeccionismo es el que mas me cuesta, aunque de los malo no es un perfeccionismo paralizante.
Los trucos que propones son muy interesantes. Muchos de ellos los practico desde hace tiempo por las recomendaciones que has dado en tu blog, y la verdad que los resultados son brutales.
Me queda por aplicar el del minimalismo digital, que aunque en otras facetas ya he aplicado el minimalismo experimentando sus innumerables beneficios en el tema digital me cuesta mucho. Tiendo a guardar demasiada info que en la mayoria de casos ni utilizo.
El habito de madrugar, aunque me cueste mucho aun, lo he empezado a aplicar para dedicar la primera hora del dia a tragarme el sapo de mi Proyecto y los resultados son muy buenos.
En cuanto a la END, la hoja de ruta que propone es brutal, y no conozco ninguna mejor. Ha superado incluso mis expectativas. 100% recommendable.
Gracias a los 2 por compartir.
Un abrazo
¡Buenas Jaime!
Me alegra que te haya gustado el artículo.
Es una gran hazaña cuando una persona quiere emprender en su propio proyecto pero su trabajo por cuenta ajena no le deja tiempo disponible. Es en esos casos cuando cada minuto que pasa en el día cuenta.
Es bueno escuchar que vas superando esos errores principales que comento. Como digo, es el perfeccionismo también el que peco a veces. Pero al menos no es tan crítico, cuano no me paraliza en seguir. Creo que ese error lo traigo heredado de familia 😛
¡Qué bueno escuchar que sigues las recomendaciones de mi blog! 😀
El minimalismo es un punto que practico desde hace relativamente poco, pero que estoy incrementando de forma exponencial. Bien por la situación personal en la que me encuentro en este momento y también por los beneficios directos que voy notando.
El hábito de madrugar es la criptonita de la mayoría de las personas 😛 Pero como dices, dedicar esas primeras horas a uno mismo para las tareas más importantes, marca la diferencia.
Poco más puedo decir de la END, que me ha llevado a donde estoy ahora 🙂
Gracias por pasarte por aquí figura.
¡Un abrazo!
¡Genial artículo Christian!
He ido viendo tu evolución en la END y eres el claro ejemplo de la productividad, se nota que sabes de lo que hablas: curro por cuenta ajena, montar tu proyecto digital de la nada, deporte… ¡y aún te quedaba tiempo para echarnos una mano por los foros de la END a los otros alumnos!
Así que ya que tengo la oportunidad, te planteo una duda que me surge en relación al punto de trabajar por bloques de tiempo, a ver si puedo aprender algo más de ti 🙂
Mi duda es: ¿usas algún método para estimar cuánto tiempo te llevará cada tarea? Es decir, si tienes que separar tu lista de tareas en bloques de tiempo de 25 minutos, tendrás que saber qué eres capaz de hacer en esos 25 minutos.
En mi caso, tiendo a subestimar el tiempo necesario para cada tarea. Por ejemplo, me pongo que en la próxima media hora haré el calendario editorial del próximo trimestre. Y luego me quedo corta. A la medio hora apenas voy por la mitad. ¿Debería seguir y acabar la tarea? ¿o tomarme los 5 minutos de descanso y luego continuar? ¿o lo que estoy haciendo mal es definir las tareas y debería sub-dividirlas más aún?
Mi mayor problema suele ser ponerme con algo, comenzar a hacer una tarea. Pero una vez he empezado me puedo tirar tranquilamente más de 1 hora sin distraerme, trabajando concentrada. Sin embargo, si paro y me tomo esos 5 minutos de descanso me cuesta horrores volver a ponerme a trabajar. Por eso siempre me ha chirriado un poco esto de los bloques de tiempo y me gustaría saber tus consejos.
¡Mil gracias y hasta pronto!
¡Hola Eva!
Gracias por pasarte por aquí 🙂
Cuando a uno le gusta lo que hace, el tiempo se le pasa volando además de disfrutarlo. Seguiré intentando ayudar en todo lo que pueda siempre.
Vamos con tu duda.
Nadie sabe lo que tarda en hacer una tarea hasta que la realiza y la mide una vez (o varias veces y estimar una media). Por eso, es importante ir utilizando la herramient Toggl lo antes posible para cada tipo de tarea. A la hora de planificar una siguiente vez, aunque te quedes corta/larga en esa estimación, irá siendo cada vez más exacta.
Los bloques de 25 + 5 son los más comunes, pero no son obligatorios. Cada uno debe encontrar con qué cantidad de tiempo se encuentra más cómodo. Con la herramienta de Tomato Timer puedes configurar tanto el bloque de trabajo, el descanso corto y la pausa larga.
Obviamente, cuanto más seas capaz de subdividir una tarea, mejor. Más enfocada en una sola cosa vas a estar. Para mí, lo máximo que puede durar una tarea, son 4 horas , que son los 4 ciclos completos de trabajo que lleva un bloque de tiempo común.
No pasa nada en parar 5 minutos y continuar con la misma tarea. Piensa por ejemplo a la hora de redactar un artículo que te lleva 1 o 2 horas (sin contar índice, maquetación, etc).
Pero como te digo, si para ti es mejor estar una hora del tirón sin parar, plantéalo de esa forma. Aquí la idea es hacer ver que los descansos del cerebro son sanos y lo refrescan para volver a la carga con lo que tengas planeado hacer.
Espero que te haya resuelto tu duda. Ya me cuentas.
¡Un abrazo!
Hola Christian,
La verdad es que este artículo me viene como anillo al dedo ya que soy una adicta a las redes sociales y no tengo una hoja de ruta, pero ya comencé a hacer mi lista de lo que tengo que hacer el día anterior y me va muy bien.
Quería saber, conoces una aplicación para bloquear las redes sociales? No puedo borrarlas (lo cual sería lo ideal) porque las necesito para mi negocio y no me quedó muy claro lo de la hoja de ruta. Te refieres a desglosar una tarea en pequeños pasos?
Muchas gracias por el post nuevamente 🙂
¡Buenas Marie!
Me alegra que te haya gustado el artículo 😀
Seguro que has experimentado ya los primeros cambios al hacer esa lista de tareas el día anterior. Es despertarte y sentir desde el primer momento del día una liberación e ir directamente al grano.
De todas las cosas que propongo, creo que es la más sencilla de implementar. Son 5 minutos al final del día frente a la media hora que te puedes tirar en la mañana.
En cuanto a las redes sociales…nos absorben completamente y cuando volvemos al trabajo han pasado horas 😛
Como dices, no se trata de borrarlas, ni no visitarlas. Se trata de darles un tiempo prudente, que puedes (deberías) planificar en la semana. Aunque se usen para el negocio, no hace falta estar frente a ellas en todo momento. Muchas de las acciones que se realizan en las RRSS se pueden automatizar ya.
Existen varias herramientas que bloquean páginas webs, pero por ponerte los mas comunes para que vayas probando te dejo estos dos: StayFocusd y Freedom.
Con ellas puedes configurar las paginas webs que quieres que se bloqueen, asignar horarios de navegación libre, permitir un tiempo máximo en internet, etc. Obviamente, tienes que tener fuerza de voluntad para no modificar a la primera de cambio 😛 Aunque si quieres ir un paso más allá, siempre puedes pedir a alguien que ponga una contraseña que tú no conozcas. Ahí no te quedará más remedio que trabajar 😀
Sobre tu duda sobre la hoja de ruta y el desglose, no me queda clara del todo, pero intento aclararlo un poco más.
La hoja de ruta es básicamente el camino que debes de tener definido en tiempo y por escrito. Se trata de colocar un gran objetivo en el calendario e irlo destripando al máximo, tanto en objetivos anuales, semestrales, trimestrales, mensuales, semanales…hasta llegar a las tareas concretas de un día. De ahí viene la importancia del desglose, del divide y vencerás.
Sin embargo, si solo actúas haciendo por hacer, tachando tareas de una lista común de «pendientes» o «to do», sin tener claro hacia donde te diriges, lo más probable es que el progreso no sea todo lo efectivo que podría ser.
Espero haberte ayudado con tus dudas. Cualquier cosa, aquí estoy 😉
¡Fuerte abrazo!
Christian,
simplemente que eres un crack tío.
Si miramos para atrás, da vértigo ver lo que has conseguido en unos pocos meses. Eso es lo importante, y en base a eso, seguir avanzando igual.
Mucha suerte de estar compartiendo contigo esta experiencia y este nuevo estilo de vida.
Enhorabuena por hacerte un hueco en este blog, que no todo el mundo lo consigue.
Y en cuanto a la productividad, poquito a poco vamos mejorando gracias a tus artículos y a tus consejos.
Un abrazo.
Buenas Rubén,
Gracias por pasarte por aquí 🙂
El placer de compartir este viaje con personas como tú es mío. Eres otro ejemplo de perseverancia y se ve cómo vas mejorando también tu productividad con el paso del tiempo.
Pronto nos veremos en el camino amigo.
Un fuerte abrazo
¡Este post es pura dinamita que nos sacude de nuestra zona de confort!
Excelente post Christian, mes has quitado muchas dudas, y has hecho de esta entrada un concentrado de toda la información valiosa sobre productividad que se encuentra en cientos de libros de desarrollo personal. Enhorabuena.
Eres un crack en cuanto a productividad. Fue un honor haberte conocido en persona 🙂
¡Hola Ali!
¡Qué bueno verte por aquí! 😀
Me alegra saber que este artículo te ayuda a salir de la zona de confort a la que estamos acostumbrados.
No ha sido tarea de unas horas poder recopilar toda esta información que planteo en el post, y también hay muchas más técnicas que se pueden aplicar. Pero tampoco es necesario saber todo para empezar a poner en marcha la máquina productiva que cada uno lleva dentro.
Espero que con estos consejos consigas todos los objetivos que te propongas y puedas disfrutar más de tu tiempo. 😉
Estoy seguro que nos volveremos a ver pronto. Para mí fue todo un honor también haberos conocido.
Cualquier cosa, ya sabéis dónde encontrarme.
¡Un abrazo!
Hola Cristian!
Me ha gustado mucho el post y me ha ayudado tambien mucho, de hecho acabo de hacer un excel para optimizar mi tiempo y tareas. Me he sentido identificada con lo que has puesto, es importante saber y darnos cuenta de como nos afectan las herramientas, como el movil, internet, etc, que usamos y què nos llevan a hacer. Si las aprovechamos en positivo nos ayudan, y si nos dejamos llevar demasiado por ellas nos desenfocamos, a mi tambien me pasa :)). Ya tengo mi excel y me ha servido tu post para ayudarme a centrarme en optmizar el tiempo, y he cogido algunos truquis que das, o herramientas.
Muchas gracias!!!
¡Hola Juani!
¿Qué tal?
¡No sabes la alegría que me da leer tus palabras de toma de acción! 😀
Y es solo poniendo en práctica aquello que vemos, escuchamos o leemos podemos seguir avanzando.
Un excel es perfecto, siempre que no te cause ningún inconveniente o dificultad técnica. Ya dijo una vez un referente en productividad, que «la mejor herramienta de planificación es la que ya estamos usando». 😉
La tecnología, como bien dices, hay que tener cuidado con ella para que no nos afecte en nuestro día a día. El móvil en particular…¡es un arma de doble filo!
Espero que esos «truquis» te sirvan de verdad. Pásate por aquí en un tiempo para ver si de verdad te ha ayudado o no 😀
¡Abrazo!