Todos tenemos miedo a hacer cosas distintas y salir de la rutina. Sobre todo cuando son algo radicales y van en contra de lo que espera de ti la gente de tu alrededor.
Desde que estaba en la facultad siempre me repetía año tras año: «necesito darle un giro a mi vida, vivir nuevas experiencias».
Pero nunca la hacía, ¿por qué?
Por el miedo.
Pero todo se transformó cuando comencé a viajar y a experimentar un montón de situaciones y experiencias nuevas.
Además, viajar y emprender son dos caras de una misma moneda.
El camino que te lleva a iniciar tu propio proyecto en internet está lleno de lugares comunes y paralelismos con tus ganas de conocer el mundo.
A Victor, de Surfea tu vida, se le escapaban todas las olas. No sabía que hacer con su vida después de siete años empleando su tiempo cada día algo que no le llenaba.
Fue precisamente viajando donde se le encendió la lucecita emprendedora y todo comenzó a cambiar.
Hoy te trae cinco momentos llenos de valor que le impulsaron a dejar un trabajo que había terminado quemándole para surfear su vida ideal.
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5 experiencias de viajes que me ayudaron a dar el paso que necesitaba
Y ahí estás tú disfrutando y recordando tus múltiples experiencias de viajes, tumbado en la arena blanca de una playa paradisíaca, caminando entre arrozales, buceando en un arrecife de coral en Tailandia o visitando templos milenarios…
Cuántas veces, estando de viaje, te has parado un momento y has pensado:
Podría estar así toda mi vida… Muchas, ¿verdad?
Viajar te abre la mente, te hace mejor persona y te enseña cada día algo nuevo.
Para mi, viajar por el mundo es descubrir cosas nuevas a diario y vivir aventuras que jamás podría ni llegar a imaginar desde la silla de mi oficina.
Si te soy sincero, pensar eso es lo que me ha llevado a cambiar mi vida y a montar mi propio blog.
Igual te preguntas: ¿cómo viajar puede hacer que alguien decida emprender su propio proyecto online?
Pues bien, te voy a explicar cómo 5 experiencias de viajes que he vivido, me han enseñado valores necesarios para cambiar un trabajo que no me aportaba nada y emprender mi propio blog.
¿Estás preparado para conocerlos? Igual despierto tus ganas de cambiar de vida y te encuentras con que no hay vuelta atrás, ¿eh?
Estás avisado.
La historia de un trabajador desmotivado
Antes de nada quiero contarte de manera muy rápida mi historia, para que puedas entender todo este proceso de transformación que he sufrido a lo largo de mi vida.
Estudié Ingeniería Informática en Barcelona y he estado trabajando como programador y diseñador web durante 7 largos años.
¿Por qué digo largos? Pues porque a mi se me hicieron eternos. Desde que empecé la carrera supe que la Informática no me gustaba demasiado, pero decidí acabar lo que había empezado.
Todo ese mensaje con el que nos educan de estudia una carrera de provecho que tenga mucha salida profesional caló en mi.
La sociedad había hecho bien su trabajo y consiguió engañarme, con lo que hipotequé 7 años de mi vida en un trabajo que no me aportaba nada.
Iba a trabajar desmotivado y sin ganas. Programar no era lo mío, no me gustaba, pero no me habían enseñado a pensar qué era lo que yo quería hacer así que me seguí guiando por lo que si me habían enseñado, ganar cada vez más dinero.
Vivir así me estaba quemando. Raro era el día que no me decía no sé qué hacer con mi vida
pero no encontraba solución.
Buscando la ola de mi vida
Durante esta etapa de mi vida, llegó un momento en el que tenía un muy buen sueldo, pero solo podía disfrutar de él viajando 3 semanas al año.
Piénsalo fríamente, ¿solo puedes disfrutar y hacer lo que te gusta 21 días de 365 que tiene el año?
¡¿Estamos locos o que?!
Para mi eso no es vivir. Me di cuenta de que yo lo que quiero es controlar mi vida y decidir cómo quiero vivir y cuándo y cómo quiero viajar. No podía seguir así.
Para entonces, yo estaba en Filipinas y descubrí que realmente si sabía lo qué quería, lo que no sabía era cómo iba a conseguirlo...
Buscar el cómo no fue tarea fácil, era cuestión de mojarse el culo, meterse en el agua y empezar a buscar mi ola, esa ola que me llevaría a vivir mi vida ideal. Pero encontrarla tuvo su trabajo…
Yo quería ser una persona más libre y, esa libertad, no la iba a conseguir trabajando para otro.
Estaba empezando a valorar más el tiempo que el dinero y ese planteamiento era totalmente nuevo para mi.
Estaba bastante perdido, no sabía ni cómo enfocar esta nueva perspectiva ni cómo emprender un proyecto propio, vamos, tenía un lío de cojones en mi cabeza y un miedo que no me dejaba actuar.
Mientras estaba inmerso en todas estas dudas y miedos, decidí recordar experiencias de viajes por el mundo para ver si así me aclaraba un poco y encontraba otra perspectiva menos viciada por la rutina y el ritmo de vida de la ciudad.
Algo así como ver la situación desde una playa del Caribe, con otro punto de vista y de manera lo más objetiva posible.
Para mi sorpresa, descubrí que muchos de los valores que necesitaba para lanzarme en esta nueva aventura, ya los había aprendido viajando alrededor del mundo y que realmente no pasaba nada por intentarlo, es más, debía intentarlo.
Dentro de mi, yo ya había descubierto que necesitaba cambiar de vida y lo único que me faltaba era decidir cómo hacerlo, así que me puse a buscar mi ola, mi manera de vivir y surfear mi vida ideal.
Una vez tomé la decisión de cambiar, todo fue mucho más sencillo. Utilicé un método muy personal para descubrir qué me gustaba y qué sabía hacer y me di cuenta de que podía vivir ayudando a gente en mi misma situación a emprender su propio proyecto.
Tenía la experiencia de haber superado ese bache y el conocimiento técnico para trabajar con la gente en el desarrollo y evolución de sus proyectos, por lo que estaba capacitado para hacerlo.
Por fin había encontrado mi ola. El proceso fue largo, estuve esperando en el agua mucho tiempo, dejando pasar olas que no eran para mi pero finalmente llegó la mía, la cogí y a día de hoy la sigo surfeando.
Cinco experiencias de viajes
Hoy quiero contarte las cinco experiencias de viajes que me hicieron recordar qué valores necesitaba para emprender mi propio proyecto y poder así montar mi blog.
Montar un blog e intentar vivir de él requiere tener claros ciertos conceptos que hay que adquirir y tener muy presentes. Gracias a mis experiencias de viaje he podido integrarlos más fácilmente a mis rutinas.
Creo que al emprender nunca hay que olvidarse de vencer miedos, ganar libertad, esforzarse al máximo, trabajar en equipo y vivir nuevas experiencias.
Si estás dispuesto a que tu vida incluya todos estos valores me da a mi que ¡ya estás preparado para emprender tu propia aventura!
Voy a intentar darte ese último empujón para animarte a cambiar de vida.
1. Honduras y el submarinismo: la importancia de vencer miedos
Cuando estuve en Honduras, allá por el 2007, llegué a una isla llamada Utila donde las actividades más típicas son el submarinismo y atropellar cangrejos de noche.
Es increíble la cantidad de cangrejos chafados que ves cada mañana… Como de noche no hay más luz que la de la luna, todo el que circula se lleva más de un crustáceo por delante.
A lo que iba, el submarinismo. Esa isla está petada de centros de buceo, mucha gente va a sacarse la certificación allí ya que, además de tener una barrera de coral muy bien cuidada y un fondo marino espectacular, es uno de los sitios más baratos del mundo para hacerlo.
Obviamente, yo que soy un amante del mar, me saqué un par de titulaciones pero no, yo no soy el protagonista de la historia.
Conmigo se sacaron el título unas 12 o 13 personas más. Entre ellas, había una chica irlandesa a la que se veía un poco nerviosa.
En uno de los primeros ejercicios, aparte de demostrar que sabíamos nadar, teníamos que sumergirnos y empezar a respirar de la bombona de oxígeno para familiarizarnos con el material.
Todo muy sencillo, no te pienses que nos íbamos a sumergir 10 metros, eran simplemente un par.
¿Qué pasó? Pues que la chica entró en pánico, estaba aterrada. Le daba un miedo increíble sumergir la cabeza en el agua, estaba muy acojonada y no pudo hacerlo.
En ese momento yo pensé: cómo pensaba sacarse un título de submarinismo en el que tendríamos que bajar a 18 metros de profundidad, no me lo explicaba…
La intentamos tranquilizar y le explicamos que no pasaba nada pero no hubo manera. Le tenía miedo al mar y esos miedos tan profundos son muy difíciles de vencer…
Venciendo miedos
Yo pensaba que al día siguiente no iba a volver pero, lejos de abandonar, al día siguiente lo intentó de nuevo. Yo estaba alucinado y expectante, a ver qué pasaba hoy.
En esta ocasión debíamos bajar a más profundidad, unos 8 o 10 metros. Ella seguía aterrorizada pero aún no se muy bien cómo, consiguió calmarse, hundir la cabeza e incluso descender con nosotros.
Le echó un valor tremendo, ella quería hacer algo y el miedo no se lo iba a impedir. Encontró la manera de superar sus miedos, acabó sacándose el título y pudo disfrutar del fondo marino de Utila.
Esa chica me dio una buena lección, me enseñó que por muchas dudas o miedos que uno tenga, si de verdad se quiere hacer algo, no hay nada que pueda impedirlo.
Los miedos están para vencerlos y no para hacerte abandonar tus sueños ante el primer impedimento
[bctt tweet=»Los miedos están para vencerlos y no para hacerte abandonar tus sueños ante el primer impedimento» username=»surfeatuvida»]
Buceando en mi propio proyecto
Tomar la decisión de dejar un trabajo estable es muy difícil.
Si además tienes un buen sueldo, pierdes una seguridad enorme a la hora de planificar cómo va a ir tu vida. Esto da miedo y solo planteártelo ya tira para atrás.
Desde que yo me lo planteé por primera vez hasta que lo hice pasó bastante tiempo.
El miedo a no saber dónde te metes, la incertidumbre que genera salir de tu zona de confort y los mensajes que recibes de tu entorno te hacen pensar las cosas más de 1000 veces.
¿Cómo afronté esto? Me paré a pensar y recordé que cuando viajas, no haces más que salir de tu zona de confort constantemente, pruebas y descubres cosas nuevas, te retas a base de vivir nuevas aventuras y son los momentos en los que yo más he disfrutado.
¿Por qué no trasladar esas sensaciones a mi vida diaria?
La historia de la chica irlandesa me hizo comprender que estos miedos que yo tenía a emprender mi propio proyecto, no me iban a frenar.
Era mucho peor tener fobia al mar y conseguir bucear a casi 20 metros de profundidad y si ella lo había conseguido, ¿Por qué no lo iba a lograr yo?
Yo sabía que podía vivir de mi blog y es por eso que me propuse vencer estos miedos, dejándome de excusas y poniendo soluciones sobre la mesa:
- Me hice un plan y pacté un despido con mi jefe aprovechando un momento que a ambos nos favorecía y así me «obligué» a emprender mi proyecto.
- Empecé a creer un poco más en mi.
- Me formé y me apoyé en profesionales para saber cómo funciona un negocio online y cómo montarlo con las mayores garantías de éxito
- No perdí más el tiempo y actué. Creé el blog y me puse manos a la obra
¿Aún sigues teniendo miedo a cumplir tus sueños?
Piénsalo bien porque vivir una vida con miedo supone no hacer lo que realmente deseas.
[bctt tweet=»Piénsalo bien porque vivir una vida con miedo supone no hacer lo que realmente deseas» username=»surfeatuvida»]
2. Filipinas y los tifones: ganando libertad
En 2012 estuve visitando Filipinas. Teníamos marcada una ruta aproximada que queríamos seguir para intentar aprovechar al máximo las 3 semanas que estábamos allí.
Por las fechas en que viajábamos, sabíamos que era temporada de tifones, así que teníamos siempre un ojo puesto en la climatología. No nos apetecía vivir según que situaciones que por desgracia se dieron poco después…
En nuestra hoja de ruta, a medio de viaje, teníamos marcado ir a la isla de Bohol y a Panglao. ¿Qué pasó de un día para otro? Que las previsiones climatológicas cambiaron y se hacía «peligroso» ir hacia allí.
Lo primero que piensas es: «Me cago en la puta, si es que lo sabía… Ahora a perder el tiempo buscando qué hacemos…»
Pero una vez te pones, ves que no es tan malo…
Esto hizo que nos replanteáramos nuestros planes y en un par de horas decidimos no ir hacia allí e invertir ese tiempo de otra manera. Decidimos perder los billetes, que ya teníamos comprados y cambiar de planes. Nos pusimos a improvisar.
Esa libertad para decidir nos llevó a descubrir un pueblecito costero llamado Port Barton en el que pasamos 3 días de relax en el paraíso.
A decir verdad ni nos preocupamos de si las previsiones climatológicas habían acertado y habíamos hecho bien o no en cambiar de planes, nos sentimos tan bien haciéndolo y dominando nuestro destino que no nos importó nada más.
No volvimos a pensar ni en Bohol ni en Panglao porque el plan alternativo fue un éxito y decidir sobre la marcha nos sentó mejor de lo que nos pensábamos.
Esa sensación de libertad, de poder decidir donde queríamos estar al día siguiente sin vernos obligados a seguir una ruta estricta o a que alguien nos dijera dónde debíamos ir, nos hizo vivir la experiencia de manera aún más intensa.
Quiero más tifones en mi vida
Cuando pensé en tener un blog, el mayor objetivo que tenía fue el de tener libertad y poder viajar y surfear siempre que yo quisiera. Sin tener que pedir permiso a nadie y pudiendo trabajar allá donde fuera.
Esa libertad me daría el poder de decidir sobre mi vida, de improvisar, de cambiar planes y de hacer realmente lo que yo quisiera hacer.
Parece algo muy simple y básico pero si te paras a pensar, tú no tienes ese poder. Hoy en día te ves limitado por tu jefe o por tu empresa. Actualmente, tú no puedes hacer lo que quieras.
Tienes que pedir permiso para cogerte unas horas y poder hacer papeleos en el banco, debes pedir un día libre para hacer la mudanza de tu casa, si hasta tienes que pedir un justificante para demostrar que has tenido visita con el médico.
Como ves estás más limitado de lo que crees.
Ser libre es un valor muy importante y fue una de las razones principales para que me decidiera a emprender mi propio blog. Con el tiempo he visto que no significa hacer siempre lo que uno quiera olvidando el trabajo, sino que significa tener el poder de organizar y decidir cuándo hacer cada cosa.
Te voy a poner un ejemplo, habrás adivinado ya que soy un apasionado del surf, ni que sea por el nombre de mi blog.
Te cuento, en el Mediterráneo hay pocos días de olas al año por lo que, cuando se dan las condiciones adecuadas, es normal que veas el mar plagado de surfistas.
Cuando trabajaba para otras empresas, si una mañana veía que había olas y era un buen día para aprovechar y surfear durante 2 o 3 horas, no podía hacerlo.
Tenía que ir a trabajar, tenía mi horario y no podía cambiar los planes así como así, igual que cualquiera que trabaje para un tercero.
Sin embargo ahora, al dedicarme a mi propio proyecto yo soy libre para decidir cuándo trabajar y cuándo no. Ahora si que tengo el poder de decisión, ahora si que puedo levantarme, irme a surfear y trabajar por la tarde o por la noche.
Esta libertad la he ganado emprendiendo mi propio blog y siendo mi propio jefe. ¿Te gustaría ser más libre?
¿Te gustaría dejar de pedir permiso para hacer todo lo que quieres hacer?
[bctt tweet=»¿Te gustaría dejar de pedir permiso para hacer todo lo que quieres hacer?» username=»surfeatuvida»]
3. Tanzania y el monte Meru: el esfuerzo tiene su recompensa
Viajé a Tanzania en 2014 y viví una experiencia que me hizo valorar el esfuerzo que puede hacer uno para conseguir un objetivo que desea.
Fui con 2 amigos míos y quisimos hacer un trekking y subir la segunda montaña más alta de Tanzania, solo por detrás del Kilimanjaro, el monte Meru. Tiene 4566 metros y la ascensión se hace en 3 días subiendo 1000 metros cada jornada. Según los porteadores es más dura de subir que el Kilimanjaro.
Para no sufrir con esa ascensión, había que estar realmente en forma, además del esfuerzo diario, el cuerpo se tenía que acostumbrar rápidamente a la altura.
Para subir nos acompañó un Ranger, con su rifle en mano por si nos atacaba algún animal salvaje, y un porteador que ayudaba a cargar algunos bultos de campamento en campamento.
Los dos primeros días no los pasamos mal del todo pero el tercero fue durísimo. La ascensión final, empezando a las 12 de la madrugada, se hizo muy larga y, con el cuerpo agotado, el tramo final se hizo eterno.
El objetivo, además de demostrarnos que podíamos hacer esa ascensión, era ver la salida del sol desde la cima así que debíamos subir durante unas 6 horas en la oscuridad de la noche africana. Qué poético ha quedado…
A mitad de ascensión, mi amiga estaba ya reventada, le costaba andar y respirar pero siguió adelante porque no quería retrasarnos la ascensión y quería cumplir el objetivo que se había marcado.
Los últimos metros hasta llegar a la cima fueron de las cosas más duras que he hecho en mi vida, te aseguro que no miento. ¡Pero llegamos! Y una vez llegamos la sensación fue increíble. ¡Lo habíamos logrado!
Ahí vi que el esfuerzo y el trabajo duro valen la pena cuando quieres conseguir un objetivo y esos valores los estoy aplicando también a mi proyecto.
Subiendo mi propia montaña digital
Como te he dicho antes el mundo del blogging y el emprendimiento no es sencillo pero tiene sus recompensas.
El tema de la libertad es muy bonito pero, si la quieres conseguir a través de un blog, detrás hay un trabajo enorme que nadie ve.
Puedes preguntar a cualquier blogger de éxito lo que cuesta hacer crecer un blog y llegar a vivir de ello.
Hay muchos momentos duros, sobretodo cuando ves que cuesta crecer, tener visitas, ganar suscriptores y conseguir clientes pero no hay que rendirse.
Un blog, como una ascensión a una montaña, tiene sus etapas, no hay resultados el primer día. Hay que ir trabajando para ir consiguiendo pequeños objetivos hasta poder llegar a la cima.
Al final todo ese trabajo duro vale la pena. Pero hay que esforzarse porque nadie te va a regalar nada, es tu proyecto y tú eres quien debe luchar por él.
Y al final hay recompensa. Que alguien confíe en mi para que le ayude a diseñar, desarrollar y hacer crecer su proyecto online es una sensación increíble.
Poder llegar a la gente y dejar tu huella trabajando con ellos, hace que ese esfuerzo valga la pena. En mi caso siento que colaboro a cambiarle la vida a alguien como tú y eso ¡¡mola mil!!
Así que ya sabes, si estás pensando en emprender un blog o un proyecto online y necesitas ayuda puedes contar conmigo.
4. Kenia y los leones: trabajo en equipo
Cuando viajé a Kenia en 2014 estuve visitando varios Parques Nacionales, entre ellos el famoso Masai Mara. Realmente es espectacular, la Sabana Africana impresiona, ver a los animales tan cerca es una de esas experiencias de viajes que no olvidas.
Tuvimos la suerte de encontrar un gran guía que nos explicaba muchas historias acerca de los animales, conocía muy bien su comportamiento y además los detectaba a gran distancia, ¡qué vista tenía el jodido!
Entre todas las historias que nos contó, una me pareció muy útil para la vida diaria y para la estrategia de crecimiento de mi blog y es de la que te voy a hablar.
Todos sabemos que el león es el Rey de la Sabana Africana. Es un animal temible, visto de cerca te impresiona la fuerza y el respeto que desprende. Es realmente espectacular ver esa musculatura moverse, es una máquina perfecta.
El gran macho, el líder de la manada, no es quien suele ir a cazar, ese trabajo está reservado a las hembras.
Suelen cazar todo tipo de animales, desde impalas a cebras, pasando por hipopótamos, ñus o rinocerontes. Y es en este último animal en el que me quiero parar.
Los rinocerontes son animales increíblemente grandes y fuertes. Da miedo verlos de lejos así que no quiero saber como son de cerca. A lo que iba, son tan fuertes que los leones no pueden cazarlos así como así.
¿Como lo hacen los leones para cazar un rinoceronte? Pues bien, el león no es tonto, uno no llega a ser Rey así como así… bueno menos en España… ehhhmmm, esto… y hasta aquí mi crítica política 😛
Lo dicho, el león de tonto no tiene un pelo y sabe que para cazar un animal mucho más fuerte que él necesita trabajar en equipo.
Para que te hagas una idea, para cazar un rinoceronte no solo se ponen manos a la obra las hembras sino que también participan los machos de la manada. Se juntan todos y van atacando al rinoceronte de manera alternativa hasta que consiguen derribarlo y acabar con él.
¿Por qué hacen esto? Muy fácil, porque solos no pueden. Necesitan ayuda y esta estrategia de caza es su manera de colaborar entre ellos.
Hay que ser un león del blogging
Al empezar algo nuevo es normal que no tengas ni idea de qué va la historia. Lo mismo pasa con el blogging.
Cuando me empecé a plantear emprender mi propio blog, no sabía nada sobre ello, no tenía ni idea de lo que implicaba y ni sabía cómo enfocarlo. En ese momento vi que no podía hacerlo yo solo así que ¿qué hice? Me convertí en león y busqué ayuda.
No solo pregunté y me informé por Internet sino que me formé e hice un par de cursos antes de lanzarme a la piscina.
Con eso conseguí aprender mucho para poder avanzar más seguro y más deprisa en mi nueva aventura digital, cacé a mi propio rinoceronte.
Una vez ya he estado trabajando en mi blog, he seguido teniendo dificultades y he cometido multitud de errores de los que he ido aprendiendo.
Pedir ayuda es positivo e invertir en formación y trabajar en equipo para conseguir el objetivo de hacer crecer mi blog, es una de las mejores decisiones que he tomado.
Este artículo como invitado, por ponerte un ejemplo, es una muestra de cómo salgo a cazar con mi amigo Antonio G.
Colaboramos y los dos sacamos beneficio de ello, yo le facilito un buen artículo y le hago ganar tiempo para sus proyectos y él me da a conocer a su audiencia para ofreceros mis contenidos, mi ayuda y la opción de hacer crecer mi número de seguidores si te gusta mi proyecto.
Juntos formamos una manada y es más fácil crecer si nos ayudamos y cazamos juntos que si no lo hacemos. El trabajo en equipo es la clave.
[bctt tweet=»Juntos formamos una manada y es más fácil crecer si nos ayudamos y cazamos juntos» username=»surfeatuvida»]
5. Experiencias de viajes por el mundo: Meteoritos, delfines e islas desiertas
A mi, como a todo aquel que ha viajado por el mundo, me han pasado cosas extraordinarias y he vivido grandes experiencias de viajes únicos, que antes no hubiera ni podido imaginar.
Te voy a contar muy rápidamente varias experiencias únicas para que te hagas una idea:
Marruecos
Cuando viajé a Marruecos en 2014, pasé una noche en el desierto del Sáhara.
La verdad que dormir entre dunas fue espectacular pero el mejor momento llegó cuando estábamos sentados charlando y tocando música después de la cena y, de repente, apareció del cielo un meteorito envuelto en llamas dejando una estela roja detrás suyo.
Vimos cómo cayó a lo lejos, muy lejos, pero en el mismo desierto. Ver eso en directo fue increíble, no había visto nada igual en mi vida y la verdad es que nos impacto lo espectacular que fue.
Honduras y Tanzania
Ya te he hablado de Honduras y Tanzania hace un rato. Pues hay una experiencia que une estos dos viajes y te la voy a contar.
En Honduras me bañé con delfines en una reserva, no estaban en libertad pero aún así fue algo espectacular. La piel de un delfín me llamó muchísimo la atención por su textura, jamás he tocado nada igual.
Es algo que siempre había soñado con hacer y allí lo pude cumplir.
En Tanzania fui un poco más allá. Iba en barco en dirección a un punto de buceo desde Zanzíbar, donde iba a realizar un par de inmersiones.
A medio camino, nos encontramos un grupo de delfines salvajes que empezaron a jugar alrededor del barco.
Le pregunté al capitán si podía saltar a nadar con ellos y me dijo que si, que no había problema, así que cogí unas gafas y salté al mar. Empezaron a nadar y a jugar a mi alrededor, pasándome por encima, por debajo, por los lados.
Fue increíble, me lo pasé genial jugando un poco con ellos y teniéndolos tan cerca.
Repúbica Dominicana
En República Dominicana viví la transformación de un puesto de lavado de coches (car wash) en un bar de copas donde se montó una fiesta tremenda en menos de 30 minutos.
Filipinas
En Filipinas dormí una noche en una isla desierta y al despertarme lo primero que hice fue darme un baño y nadar alrededor de la isla.
Y como estas hay muchas más experiencias únicas que solo se viven viajando.
Igual te preguntas ¿qué puedo haber aprendido para mi blog a raíz de haber vivido varias experiencias únicas mientras viajaba por el mundo?
Pues precisamente, estas experiencias de viajes únicas, me han enseñado a valorar esa sensación de dar con algo extraordinario y en el mundo del blogging o los proyectos online, no hay nada más extraordinario que ayudar a los demás.
[bctt tweet=»En el mundo del blogging, no hay nada más extraordinario que ayudar a los demás» username=»surfeatuvida»]
Valorar lo extraordinario que es que alguien me diga que le he ayudado con un tema en concreto del que hablaba en uno de mis artículos, es una sensación única y por la que vale la pena el esfuerzo invertido.
Hoy en día los negocios están girando a eso, a ayudar a los demás y es el camino que hay que seguir para tener éxito online.
Valorar lo importante que es ayudar a la gente y conseguir hacerle la vida más fácil a alguien, son objetivos que debe estar presentes en todo proyecto online.
Todo eso no lo veía y no lo valoraba en mis anteriores trabajos porque no recibía feedback de los clientes. Yo trabajaba pero no sabía a quien ayudaba aquello que yo estaba haciendo.
A día de hoy, estoy en contacto permanente con todos los lectores que me quieran escribir o comentar y eso hace que te des cuenta del poder que tiene un blog para ayudar a las personas. Esas son las experiencias únicas que me da mi blog.
La aventura de emprender
Como ves, a lo largo de estas experiencias de viajes por el mundo, he ido aprendiendo muchas cosas que me han servido para cambiar mi vida y para emprender mi propio proyecto.
Viajar me hizo darme cuenta de que yo no quería seguir así, no quería vivir como un esclavo, quería ser libre y eso me hizo saltar.
¿Te has planteado si estás viviendo la vida que quieres vivir? ¿Si las experiencias de vida que te estás llevando son las que verdaderamente deseas?
Actúa, muévete. Transformar tu vida y emprender es toda una aventura que vale la pena vivir.
Te dejo con unas preguntas:
- ¿Tienes miedo a hacer cosas distintas? ¿Por qué?
- ¿Qué te han enseñado a ti los viajes que has hecho alrededor del mundo?
Cuéntamelo en los comentarios.
Por cierto, si eres tan viajero como yo y tu sueño es vivir viajando para recorrer todo el mundo, en la Escuela Nómada Digital estarán ofreciendo un TRAINING GRATUITO en el que te enseñan cómo hacerlo paso a paso. Empieza el 15 de junio.
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25 respuestas
¡Hola Victor! Preciosas esas experiencias.
Personalmente viajar me ha enseñado que el mundo es un lugar demasiado bonito como para no recorrerlo y que no debo tener miedo al cambio ya que al fin y al cabo el cambio es lo unico constante en la vida 🙂
Totalmente de acuerdo Miriam. Hay que ver mundo, hay que aprender, hay que crecer y hay que ir cambiando con lo que uno va viviendo y aprendiendo, solo así se encuentra el camino correcto. Un abrazo!!
Muchas gracias Antonio por abrirme las puertas de tu blog.
Escribir este artículo fue genial porque me hizo recordar muchas anécdotas de viajes de hace varios años y que ya no tenía presentes. Me lo he pasado genial 😀
Espero que sea muy útil para tu audiencia y que además se lo pase bien leyéndolo que de eso se trata 😉
Un abrazo!!
Verme reflejada en este post me da fuerza para seguir el camino marcado por mi corazón y por mi intuición!
¿Miedo? Pues claro que sí, pero lo valiente es hacerle frente!
Di que si Mónica, ¿quién dijo miedo? Me alegro que te haya gustado el artículo y te dé fuerza y energía, mucho ánimo!!!
Yo también veo siempre muchos paralelismos entre emprender y viajar. Y de hecho, creo que viajar (especialmente un viaje largo) te dota de unas herramientas muy útiles para el emprendimiento y para la vida en general.
Te ayuda a vencer muchos miedos (que ni siquiera sabías que existían antes de planteártelo), te obliga a tomar decisiones constantemente y te ayuda a tomar distancia y ver las cosas con mucha más perspectiva.
Tus palabras me han resonado y llegado muchísimo. Me encuentro en un momento muy especial en el que lo que explicas me ayuda muchísimo, me emociona un poquito (supongo que estoy sensiblón jejeje) y me da un chute de energía tremendo.
En breve emprenderemos un gran proyecto muy especial para nosotros y las palabras de gente como tú (que es un bien muy escaso, por lo menos en nuestro entorno) son oro puro.
A ver si un día de estos podemos vernos un rato. Ya te contaré… 😉
Gracias por este regalo que nos has hecho en forma de post y gracias a Antonio por abrirte las puertas (y por lo que hace cada día).
Hola chicos,
es increíble ver cómo viajar y emprender pueden ir de la mano en muchos aspectos.
El tema de los miedos que comentáis es muy curioso, cuando estamos en casa o en nuestro entorno, todo parece que dé miedo, vergüenza o que importe mucho lo que piense el resto pero una vez te mueves por el mundo y ves realmente lo que hay por ahí fuera… esos miedos pasan a segundo plano y los empiezas a relativizar.
Ese paso es importante para empezar a emprender, el darse cuenta de que hay que vencer esos miedos porque están más en nuestra cabeza que en la vida real.
Espero que ese gran proyecto vaya genial, a ver si me contáis más sobre él cuando lo lancéis 😉
Un abrazo y gracias por comentar!!
Qué bueno veros por aquí de nuevo chicos!
Totalmente de acuerdo con vuestro comentario. A celebrar esa parte ying Jorge 😉
Un abrazo
¡Y lo que te queda por viajar, colega! Me encanta leer a gente que mueve el mundo a empujones. Abrazos
Ya lo puedes decir Álvaro!! Moverse, hacer cosas y no conformarse, ese es el secreto.
Un abrazo!! 🙂
Victor, me ha encantado!! Mil gracias por todo lo que has compartido con nosotros. Me siento tan identificada. ¡Motiva mogollón!
En mi caso, contestando a tu primera pregunta, yo soy un bicho raro. Yo muero si no hay cambios. Busco el cambio, es más, durante una época pensé que tenía algún problema, te lo juro. Los cambios son lo que a mí me da la vida, y ha sido así desde que era muy jóven, pero claro, cuando esto lo decía hace años, me miraban raro. Ahora es diferente, y entiendo el por qué me gustan los cambios y miedo al cambio, nunca! Miedo a la rutina, a no aprender, a no levantarme con ideas nuevas, a no descubrir lo diferente, esos son mis miedos!! jejeje
Y los viajes por el mundo, vivir por el mundo me ha enseñado:
1. El mundo, la tierra es increíble, y nosotros como parte de ella también lo somos. Sólo tenemos que aceptar que formamos parte del mundo y cuidarlo.
2. La mayor parte de las personas que viven en este mundo son buenas. Hay muchas más personas buenas que malas, aunque nos intenten convencer de lo contrario.
3. El que se arriesga a vivir en este mundo y a descubrirlo de verdad, siempre recibe una gran recompensa. Tú ya sabes la que es, yo también, y todo el que arriesga… Pero eso sí, hay que lanzarse a descubrirlo! 😉
Gracias por el artículo y ojalá coincidamos en algún lugar del mundo! Safe travels! 😉
Hola Ana, eso es genial, haberte acostumbrado al cambio seguro que te ha hecho una persona mucho más fuerte y segura y si no tienes ningún tipo de miedo al cambio ya es brutal, a mi sigue dándome algo de respeto inicial, luego ya se me pasa 😛
Estoy muy de acuerdo en que hay mucha más gente buena que mala en este mundo, pero los jodidos malos hacen más ruido…
Un abrazo y nos vemos por el mundo 😉
Que grande Victor!
lo primero felicitarte por tu exito ya conquistado en ese cambio de vida y que ahora gozas en la actualidad!
yo quiero empezar tambien en esto, soy como tu un loco de los viajes, puedo preguntarte algo?
desde que decisite empezar en esto y formarte atraves de diferentes cursos y tal, mas o menos cuanto tiempo te llevo a conseguir tus primeros ingresos con el blog?
gracias por tu tiempo!
Hola Jose! Muchas gracias 😀
Te voy a ser sincero, yo lancé el blog en Julio y en Septiembre ya tenía mi primera clienta. Todo depende de cómo trabajes la estrategia. Yo seguí formándome y a día de hoy voy generando ingresos, igual aún no para vivir exclusivamente del blog como un marajá pero suficiente para ir tirando y aprendiendo para incrementarlos cada vez más.
El proceso no es inmediato, hay mucho que aprender, que probar y que implementar pero es apasionante y con trabajo da sus frutos!!
Mucho ánimo con tus proyectos, cualquier cosa ya sabes dónde encontrarme (en mi blog claro) 😉
Un abrazo!!
El año pasado se acabó mi relación de 10 años con mi ex y tocaba deshacer casa, esclarecer deudas y afrontar legalidades… me sentía aterrada, aunque uno sobrevive a los cierres amorosos me atacaban todas la preguntas de presiones sociales que aplican al caso. Entonces me di una escapada a uno de los tantos mini paraísos que hay en la Riviera Maya, escogí un pobladito con un cenote con ojo de piedras desde el cual podía saltar a su interior… solo había que superar los 4 o 5 metros que me separaban del agua. Recuerdo pararme en la orilla aún convenciéndome que, si podía vencer ese miedo y hacerlo por mi misma, podría superar todo aquello porque al final me seguiría teniendo a mi… Aproveché el momento en que el sol iluminó el fondo y fue como un «no estás sola, tú puedes» para saltar al vacío y lanzar un grito liberador… Es increíble la felicidad que me dio haberlo logrado, no solo porque vencí el miedo… si no también porque en eso «sencillo» había descubierto mi fortaleza para enfrentar todo lo que seguía.
Genial esta historia Rebeca, otro ejemplo más de que gracias a viajar aprendemos a crecer y salir de nuestra zona de confort.
Vaya grito tuviste que lanzar jejeje
Mucho ánimo con esta nueva etapa!! un abrazo!!!
Muy buen articulo Victor!
Me ha encantado leer tus experiencias. Yo la verdad que ahora mismo estoy en ese punto en el que me repito cada día «no se que hacer con mi vida». Hace poco que estoy siguiendo de cerca unos pocos blogs (inteligencia viajera es posiblemente ‘mi brújula’) que me están abriendo mucho la mente, que me hacen ver que yo también puedo ser capaz de conseguirlo… Tengo algunas ideas en mente, pero como todos al principio, estoy ciego de conocimientos, y no se como llevarlo a cabo…pero gracias a gente como vosotros, no me siento solo en esto y se que puedo contar con la ayuda que necesito.
Desde hoy, tu blog, surfeatuvida.com, pasa a estar en la lista de esos blogs que siga de cerca.
Un fuerte abrazo!
Carlos de L.
Hola Carlos, me alegro mucho que te haya gustado.
Es un punto complicado el no saber qué hacer, realmente hay que trabajar mucho el autoconocimiento, esa es una de las claves. A mi viajar me ayudó mucho y pararme a pensar en lo que realmente me gustaba y se me daba bien también.
Precisamente en unas semanas saco unos cursos gratuitos para mis suscriptores que te pueden ayudar. Si te interesa suscríbete y te informaré en cuanto lo lance (junto a mi nuevo diseño).
Un abrazo y gracias por tu opinión 😉
Wow!..a veces lees articulos que es como leerse a uno mismo en su fase inicial.Yo estoy en ese punto de «no soporto/me aburre mi trabajo», ese estres, esa vida entera metida en una oficina,ese hacer algo que solo te llena el bolsillo(que tampoco te lo «llena»…si al menos lo hiciera :)), esa insatisfaccion y sin sentido de tu vida ..es decir, el el punto de se lo que no quiero pero eEl problema es…¿y ahora que es lo que quiero?,el punto ese de estar mas perdida que Tarzan en nueva York y no saber para donde tirar….no se si soy yo pero creo que ese punto es mas complicado que el de perder el miedo una vez lo tienes claro.
A veces tambien he pensado que quizá liarme la manta a la cabeza y pirarme por ahi(por eso aterrice en este blog),quiza me sirviera de inspiración (ya el pirarme sola por ahi me da un respeto que no veas, asi que ya seria un comienzo..) y por lo que dices,parece ser asi,no?
Hola Betty, qué tal estás? Pues como bien dices, esa fase de no saber qué hacer es complicada y no es fácil salir de ella. Viajar puede ser una solución pero cada uno tiene que seguir su camino y hacer lo que realmente le apetezca y crea que le conviene. Inspirarse está bien pero cada uno debe tomar sus propias decisiones.
Si te ayuda, en mi blog ofrezco un curso gratuito con técnicas y ejercicios para intentar salir de ese bloqueo.
Mucho ánimo que de todo se sale 😉
Un abrazo!!
Hola!! Excelente artículo, puedes mandar el link para los ejercicios sobre el bloqueo por favor… Mil gracias?
Que gran articulo Victor!! Me encanto! No podia dormir y encontre esto. La verdad me inspira a poder dar el gran salto. Soy profesional de la salud, enfermera en quirofano. Y me miro y se que no quiero esto para el resto de mi vida. Mi sueño es viajar. Y tener mi propia empresa de turismo. Dios quiera algun dia pueda lograrlo. Tengo 25 años. Hay momentos en los cuales me siento grande para volver a arrancar, pero tu articulo me trasmite que siempre hay que seguir los sueños.
Hola, me alegro de que te encantara el post y te haya servido de lectura motivacional. No dudes de que eres grande para hacer lo que quieras, aunque cueste trabajo todo se puede conseguir. Hay que ponerle ganas y esfuerzo. Lo importante es que te sientas feliz con tu vida y con lo que haces. Un fuerte abrazo!!
Hola Victor,
Me encanto tu articulo, personalmente a nosotros nos cambio mucho la forma en la que contemplas todo. Empezas a comprander mas a las personas y porque actuan de la forma que lo hacen, entendiendo su realidad.
Sentis que te sacaron de un huevo al cual no vas a volver jamas.
A las unicas personas que jamas pude comprender son las que te dicen, me gustaria hacer lo que haces vos…y no hacen nada por ello… A esas personas les digo siempre que se animen, que no se van a arrepentir nunca.
Abrazo
Hola Manu, muchas gracias por tu artículo.
Tienes razón en que hay gente que solo mira y no se pone a actuar. A esas personas como dices hay que animarlas porque los cambios son positivos.
Un saludo